jueves, 26 de abril de 2012

Surfeadores de dimensiones: ahora la quinta dimensión.


El Universo se expande, está en movimiento. Y tal vez el universo se esté expandiendo porque ahora nosotros entendemos que es así. Aunque parezca que está quieto. Nosotros también nos movemos aunque a veces parezca que no salimos del mismo lugar. Hay movimientos imperceptibles para nuestro ojo humano, pero que  son intuidos por nuestras Presencias aunque no tengamos el conocimiento para captarlos. Cuando esto sucede, sólo sentimos que “algo raro pasa”.
La visión del hombre sobre todo lo que toca y ve, está cambiando. Necesita cambiar. Quienes de nosotros podamos adaptarnos a este crecimiento veremos y pensaremos situaciones y cosas que en otros momentos históricos hubiesen sido impensadas hasta para nosotros mismos. Quienes de nosotros no podamos adaptarnos a este crecimiento sólo permitiremos que aflore  la sensación de caos y desequilibrio, porque lo que está sucediendo ahora no puede ser entendido a través de la inteligencia tradicional.
Hay energía en todos lados, energía que se comporta de acuerdo a los estímulos y otros tipos de energía que se mueven en otros universos. Las alas de una mariposa pueden generar oleadas de energía en otras  partes, y esto no es una frase poética aunque sí tal vez una forma poética de expresar una realidad. Todo se expresa. Los pensamientos son energía,  los sentimientos son energía, nuestras acciones generan energías, las palabras mueven y emiten energía.
Todo tiene la posibilidad de ser explicado y también tenemos la posibilidad de explicarnos, rectificarnos, aceptarnos y transmutarnos.
La nueva física cuántica  nos muestra como es que este universo está en movimiento y a través de su irrupción los relojes pasan a ser los famosos relojes de la pintura de Dali. Hay varias dimensiones en las que podemos incursionar. Somos surfeadores de dimensiones. La ciencia ficción es ciencia realidad hoy por hoy.
Estamos en una realidad interdimensional, hay nuevas frecuencias que están ingresando a nuestro planeta y con ellas la  posibilidad de expandir nuestras conciencias. Un pensamiento correcto, un salto cualitativo y evolutivo nos permiten pasar de una dimensión a otra. Las llaves que abren las puertas interdimensionales son relojes de arena que al darlos vuelta abren la cerradura de la dimensión que corresponda, tercera, cuarta ó quinta dimensión. Esta última es en la que estamos llamados a incursionar en este momento evolutivo planetario.
Cada una de ellas  nos aporta algo particular y tenemos la posibilidad de usarlas para nuestro crecimiento personal. Lo fundamental es  autoconocernos todo el tiempo, ya que es la condición sine qua non para que la apertura de puertas funcione en forma perfecta para cada uno de nosotros. ¿Porqué autoconocernos?, porque el conocimiento es Luz y Poder en cualquier ámbito de la vida y es el que nos permite reconocer la puerta/dimensión correcta para cada uno de nosotros y para lo que estemos necesitando precipitar.